E-commerce
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Comercio electrónico
El mercado online
Actualmente, vivimos en una sociedad en constante evolución, donde el progreso tecnológico hace que surjan nuevas formas de comercio con bienes y servicios. Los vendedores que logran incorporar las nuevas tecnologías aplicadas a su modelo de negocio son aquellos que consiguen mantenerse en el mercado, evitando un claro proceso de selección natural que provoca que las empresas que no se adaptan poco a poco vayan perdiendo cuota de mercado y teniendo dificultades para competir en el mismo. Es aquí donde aparecen las herramientas que proporciona el comercio electrónico (e-commerce), que facilitan la venta online de productos y servicios.
En función de las distintas técnicas llevadas a cabo en un e-commerce, se pueden distinguir tres tipos de e-commerce: e-commerce B2B, e-commerce B2C y e-commerce C2C, a continuación mostramos en qué consiste cada uno de ellos.
¿Qué forma de E-commerce es mejor para tu negocio?
Dependiendo de cuál sea tu objetivo final, y a que se especialice tu empresa, se utilizará un tipo de e-commerce específico.
Por ejemplo, si tu compañía se especializa en prestar servicios de software outsourcing, probablemente el tipo de e-commerce que mejor le convenga es el B2B; por otro lado, si eres un negocio pequeño que vende productos (de cualquier tipo), tu mejor opción es utilizar un método de B2C, ya que te permite conectar directamente con potenciales clientes que se encuentran buscando los productos que tu empresa puede ofrecer.
Fiscalidad de un e-commerce (comercio electrónico)
Cuando nos abrimos al mundo y vendemos online a través de un e-commerce (comercio electrónico), no debemos pasar por alto la legislación fiscal a la que nos enfrentamos.
Son muchos los elementos a tener en cuenta a la hora de tributar por las transacciones que llevamos a cabo a través de nuestro e-commerce, ya que dependerán de aspectos tales como el origen y destino de la mercancía, el tipo de mercancía (bienes o servicios), los destinatarios de las mismas (B2B, B2C, C2C), … Además de los importes que facturamos en conjunto a cada país, que pueden hacer que nos veamos obligados a darnos de alta en otros países para poder seguir comercializando nuestros productos, en los casos en que superamos los umbrales permitidos.
Es importante que conozcamos la normativa y respetemos la legislación para evitar sanciones por el incorrecto tratamiento del IVA en las ventas online.
Business to Business
Lo que vendría siendo comercio a comercio, en español. En este tipo de comercio, todas las transacciones comerciales se realizan entre empresas, sin intervención alguna de los consumidores finales. Básicamente, se trata de relaciones entre dos empresas que contratan/trabajan con los servicios de la otra.
E-commerce B2B
Business to Customer
Negocio a cliente y es el tipo de e-commerce más conocido y utilizado en el mundo. De hecho, la gran mayoría de empresas con plataforma online utilizan este tipo de e-commerce.
Este tipo de relación es bastante sencilla, y sucede cuando la empresa ofrece sus bienes y servicios a un cliente final. Básicamente, se enfoca en la transacción realizada entre la tienda online y el consumidor.
E-commerce B2C
Costumer to costumer
De consumidor a consumidor. Cuando una persona vende algún artículo que ya no le sirve, a otra persona a través del internet, está participando en un tipo de comercio C2C.
Este tipo de e-commerce lo vemos diariamente en sitios como Mercado libre y Craigslist, donde usuarios finales están constantemente vendiendo artículos personales (normalmente usados) que ya no necesitan.
E-commerce C2C
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